Composición del huevo y desarrollo de un huevo fecundado

El huevo de la gallina se compone de: yema, 31 %, albúmina o clara, 59 %; cáscara 10 % (cifras aproximadas), con todo la composición de agua se eleva hasta el 66 %; las proteínas contenidas en el huevo serían del 13 %; la gras contenida es del 10,5 % y por último las cenizas contendrían otro 10,5 %. El desarrollo comienza en el ovario, donde se forma la yema. En el ovario existen muchos óvulos, cada uno de ellos encerrado en un folículo. La yema se va depositando en capas concéntricas, y cuando el proceso se completa, el folículo se rompe y la yema, envuelta de una membrana, como queda dicho anteriormente, pasa al oviducto. Ahí se forma la clara y luego la cáscara, requiriendo cada proceso varias horas. Durante su paso por el oviducto, el óvulo es fecundado si hay allí espermatozoides. Después de completada la formación de la cáscara, el huevo sale por la cloaca. Colocado en condiciones apropiadas de temperatura, el huevo fértil se transforma en polluelo en veintiún días. El proceso reproductivo del gallo es similar al de los mamíferos.

 

Órgano reproductor femenino
Órgano reproductor femenino
Órgano reproductor masculino
Órgano reproductor masculino