Metodología

La metodología ha de ser participativa e interactiva entre los distintos niveles de trabajo existentes, habida cuenta que la sociedad cada vez demanda una mayor colaboración e implicación de los grupos de trabajo para el mejor desarrollo de una actividad. Para ello todos los estudiantes deben conocer los objetivos que se plantean en este tipo de experiencia, por lo tanto han de estar familiarizados con el experimento: Evitando que los estudiantes puedan acudir al aula sin haber realizado trabajo previo de reparto y búsqueda de la información necesaria para su desarrollo, así como la puesta en común de toda esta información para una mejor optimización del proyecto a desarrollar.

Todo ello, permite optimizar el uso de los recursos, con lo que se requiere menos tiempo para realizar las prácticas.

Por su parte, aplicar este tipo de metodología permite una disminución del uso incorrecto del equipamiento. Además, se puede hacer una comparación del comportamiento de modelos matemáticos frente a dispositivos reales: Los modelos matemáticos se obtienen simplificando el comportamiento de los dispositivos reales, lo que puede producir comportamientos sensiblemente diferentes. Al tener la oportunidad de comparar ambos comportamientos, los alumnos pueden extraer conclusiones acerca de la importancia del experimento realizado.

Todo esto nos permite poder utilizar diversos aspectos metodológicos de trabajo que les ayuden en su futura vida laboral. También les permitirán un manejo de herramientas informáticas actuales, con lo que aportar al alumno una serie de conocimientos transversales que si bien pueden no ser el objetivo principal del laboratorio que se esté utilizando, le servirán en muchos ámbitos en el futuro.

Por otro lado, la repetitividad de los experimentos, los alumnos pueden repetir de forma totalmente fidedigna las condiciones bajo las que se realizaron los experimentos y reproducirlos con la certeza y fiabilidad de las mismas condiciones en las que se hayan podido desarrollar todos los experimentos anteriores. Todo ello, permite también realizar diversos experimentos de manera simultánea con los recursos con los que el laboratorio remoto esté dotado, pudiendo así realizar cada grupo de trabajo, distintos o idénticos experimentos sin que se dé una inferencia con los demás grupos que en ese momento estén conectados al laboratorio a través de su propia terminal. Además de la ventaja que supone en tiempo, se favorecen procesos colaborativos como el de "tormenta de ideas", ya que todos y cada uno de los alumnos ha realizado su experimento y puede aportar su percepción de lo que allí ha ocurrido.